Los procesos legales que muchas veces acompañan situaciones tan difíciles como la pérdida de un ser querido pueden resultar para la persona desagradables, ingratos o abrumadores. Sin embargo muchos de ellos son ineludibles, y en algunas ocasiones la persona que toma la responsabilidad se siente poco acompañada o incomprendida por su entorno. Las personas ante una pérdida experimentamos síntomas físicos, emociones, reacciones, comportamientos y pensamientos, acordes con la experiencia subjetiva que representa el duelo, y pueden resultar a veces difíciles de manejar.